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Mermelada de frutos rojos

Esta mermelada de frutos rojos y semillas de chía es super fácil, rápida y saludable. 

Por sus ingredientes, es una mermelada rica en fibra y antioxidante. Una variable más para consumir frutas. Solo necesitas 20 minutos para hacerla y tener un desayuno, merienda o postre saludable listo!

Hacerla en casa nos permite tener más contacto con los alimentos que consumimos, elegir a conciencia los ingredientes, y evitar así consumir ultraprocesados. 

Siempre hacer preparaciones caseras es una estrategia para incorporar a los más chicos en sus preparaciones, eso también es beneficioso para que conozcan los alimentos que consumen y así aumente la aceptación de los mismos.

Consumirla con tostadas, avena, panqueques, como relleno de algún budín, bizcochuelo, muffins, waffles y bagels queda espectacular!

Y lo mejor es que solo tiene 4 ingredientes! Los dejo a continuación:

2 tazas de Frutos rojos. Puedes usar una mezcla de ellos o solo el que más te guste. Dentro de los frutos rojos encontramos los arándanos, frutillas, frambuesas y moras. Son ricas en antioxidantes, fibra y vitaminas!

2 cucharadas soperas de Semillas de chía. Este ingrediente permite que la mermelada tenga la textura gelatinosa gracias a los mucílagos que contiene. 

2 cucharadas soperas de Miel. Este ingrediente ocupa el lugar de endulzante natural, para evitar el uso de azúcar refinada o edulcorantes artificiales.

1 cucharada sopera de Jugo de limón. El jugo de este cítrico genera un equilibrio perfecto entre la dulzura y la acidez. Es opcional, pero no teman agregarlo ya que da un sabor espectacular.

¿Cómo hacemos esta mermelada?

El primer paso es cocinar los frutos rojos en una olla pequeña, caliente a fuego medio y cocinar durante 10 minutos. Importante revolver cada tanto. Cuando noten que los frutos rojos comienzan a cocinarse y ablandarse, triturarlas con un tenedor o pisa papa hasta que tenga la consistencia deseada. Según su gusto si lo dejan con más o menos trozos de frutas. Si no les gusta que queden trozos grandes, también pueden utilizar una minipimer.

Luego que pasaron los 10 minutos de cocción, retirar la olla del fuego y agregar las semillas de chía, miel y jugo de limón. Mezclar bien para que todo quede incorporado uniformemente, y dejar enfriar la mermelada. Mientras más tiempo la dejamos en reposo, más va a espesar por las semillas de chía.

Luego de esto ya está lista para que la disfruten:

  • untando una rica tostada con pasta de maní y mermelada.
  • untando la mermelada sobre pan fresco, bagels, muffins o galletas saladas.
  • para consumir con yogur, granola y frutas.
  • En un waffle con frutas y mermelada.
  • Como relleno de algún bizcochuelo, muffin o budín.
  • También puede utilizarse en cheescake para la cobertura, en pasteles, brownies.
  • Y otra opción es utilizarla caliente, colocándola en un tazón de helado para obtener un almíbar más saludable.

Cuando la mermelada esté completamente fría, pueden transferirla a un frasco o recipiente y mantener en refrigerador por una semana.

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